4 de noviembre de 2021 Por las hoces del Río Ebrón.
El Cuervo es un pequeño municipio que pertenece a la Comarca Comunidad de Teruel, situada al sur de Aragón, se encuentra a una altitud de 905 m. sobre el nivel del mar y con una población de 98 habitantes.
Desde la localidad turolense del Cuervo, continuamos en coche por pista cruzando el río aparcando el coche en una zona donde hay un pequeño espacio para dos o tres coches , antes de la zona del picnic Pozo de Las Ollas. La zona donde aparcamos se sitúa a 978 metros de altitud.
A partir de este punto andaremos casi su totalidad por los márgenes del río Ebrón. La ruta está muy bien señalizada con estacas que tienen una marca roja, en algunos tramos discurre por pasarelas y alguna zona de cuerdas. Durante la que contemplaremos las aguas turquesas del Ebrón, y su foz que lo hace discurrir entre paredes vertiginosas. Siempre seguimos las balizas que indican Estrechos del Río Ebrón.
A lo largo de la senda nos encontraremos, desde puentes, y pasarelas, hasta escaleras metálicas ancladas o excavadas en la piedra, pero lo más bonito de todo es la parte que discurre sobre el agua en los estrechos de Cañamar.
Las primeras escaleras de madera, se encuentran a 983 metros de altitud.
A los 300 metros andados una vez superada la escalera de madera comienza una pequeña bajada que hay que hacerla con cuidado hasta la senda del cauce del río a 1001 metros de altitud.
Recorridos 400 metros cruzamos el primer puente o más bien pasarela de madera sobre el cauce del río.
Llevando 1,100 kilómetros desde el punto de inicio llegamos a las pasarelas que discurren a escasos centímetros sobre el río Ebrón a su paso por una maravillosa foz.
Con 1,6 kilómetros recorridos llegamos al puente metálico verde situado a 1005 metros de altitud.
Llevando 3 kilómetros recorridos iniciamos el regreso hasta donde aparcamos el
coche y desde allí regresamos por la pista que nos llevará hasta el Cuervo,
aparcando al lado del restaurante Los Chorros que para nuestro disgusto está
cerrado.
De vuelta en el Cuervo nos dimos una vuelta por
una preciosa senda que discurre por la huerta y que comienza y termina en el
merendero Los Chorros, como curiosidad nos llamó la atención las instalaciones
de una piscifactoría abandonada.
Las fotografías aparecen por orden de ruta.
Serafín Martín.
Fuentes propias y: