Por Francia 4 de octubre de 2024. Villeneuve les Béziers, Esclusas de Fonseranes, Colombiers, Túnel du Malpas, Oppidum y musée archéologique de Ensérune.
Desnivel positivo 108 metros
Desnivel negativo 108 metros
Altitud máxima 120 metros
Altitud mínima -34 metros
La ruta de hoy comienza en Villeneuve les Béziers. Por el interior de esta localidad hago unos 2 kilómetros.
Su municipio se asienta entre los 2 y 51 metros de altitud, entre el campo y el mar, y a medio camino de Montpellier y Perpiñán, cerca de la frontera española y el Parque Natural Regional del Alto Languedoc, o el Canal du Midi, patrimonio mundial de la humanidad, que discurre por esta localidad. Villeneuve-lès Béziers aparece en textos hacia el año 778 con el nombre de "Villanova", heredado de una villa galorromana o carolingia.
El pueblo de Villeneuve de Beziers, se construyó en círculo alrededor de un edificio del siglo XI. Varias veces dañado, ha sido reconstruido varias veces. Estuvo protegido en el siglo XII por un castrum y luego por un castillo feudal que incluía dos torres almenadas, un foso y fuertes murallas. Quemado durante la cruzada contra los albigenses en 1209, llevó el nombre de Villeneuve-la Crémade (el quemado), hasta 1631. La Iglesia de San Esteban procedente de la iglesia románica, probablemente construida entre finales del siglo XI y el siglo XII. La nave, dotada de 6 potentes contrafuertes, es una creación de los años 1659-1660. . El elemento destacable es el campanario, excepcional por su esbeltez, fechado entre los siglos X y XI en su parte inferior cuya base y los tres primeros pisos son cuadrados. Más tarde, en el siglo XII, se coronó con dos plantas octogonales, coronadas a su vez en el siglo en el siglo XIV y XVI con una linterna almenada octogonal para que sirviera de torre de vigilancia. Alberga dos campanas llamadas Bernardette y Roseline que fueron instaladas en 1934. Entre las capillas construidas a finales del siglo XVII entre los laterales, se encuentra la capilla de Saint-Jacques, cuyo sótano se transformó en bóveda para la familia del marqués de Villeneuve. En el interior, se puede admirar el interesante mobiliario: pila bautismal, mesa santa de hierro forjado y mármol, órgano, pila de mármol rojo, pinturas de los siglos XVII y XVIII. Del castillo, destruido en 1937, queda una torre consolidada y restaurada, que sobrevivió al fuego ordenado por Luis XIII. En el centro de la ciudad, también se puede disfrutar de los restos del priorato Thounieux que son en forma de antiguos porches.
En el kilómetro 5,89 llego a la altura de Industrias Cameron de Béziers.
En el kilómetro 7´3 esclusas y puerto de Béziers
En el kilómetro 7,53, puente acueducto sobre el Río Orb, desde donde tengo una magnífica panorámica de la ciudad de Beziers, y la catedral de San Nazario, construida en el siglo XIII. Esta fortaleza gótica con vistas a la ciudad no tiene parangón en cuanto a originalidad. ¡Podríamos creer que estamos visitando un castillo fortificado! Y, sin embargo, el matacán encima del rosetón y las troneras al lado de las torres y torretas no son más que un señuelo: se trata de una escenificación de la fe católica para controlar la herejía cátara. En el interior, otras singularidades esperan al visitante. Las puertas de madera esculpida con forma de ventanales incrustados en la piedra también constituyen otro trampantojo. En realidad no se han abierto nunca debido al viento, que podría derribarlo todo. Béziers fue fundada por los griegos en el siglo VI a C. Luego ocupada por el Imperio Romano, su fortaleza estaba conectada a Narbonne por el camino Domiciano. Alrededor de la ciudad de "Biterre" se desarrolla el cultivo de la vid y el olivo, los bosques de roble se borran. Esta joya "galo-romana" es entonces invadida por los visigodos, y se establecieron allí. Carlos Martel rechazó a los sarracenos en Poitiers en 732, que también conquistó y ocupó Béziers en 737 (y destruir el anfiteatro romano de pasada), cuando terminó de expulsar al ejército árabe al otro lado de los Pirineos...Otro episodio trágico de Béziers es la “Cruzada” contra los cátaros: "Matar a todos, Dios reconocerá a los suyos." Estas palabras de un legado papal de Roma dan rienda suelta a la "gran masacre" de 22 de julio de 1209. Un "Gran Mazel", como dicen en occitano. La cruzada albigense contra "la herejía cátara," da lugar así a la entrada a sangre y fuego de los cruzados en Béziers y la matanza de su población. El ejército del rey de Francia y Roma se tomará entonces cuarenta años para terminar esta guerra de saqueos, y quemas de expiación. Pero Béziers es además el lugar de nacimiento de Pierre-Paul Riquet, fundador del Canal del Mediodía, y del que disfruto paseando en bicicleta por sus orillas.
En el kilómetro 8,53 pasarela con ascensor sobre el canal, que se dirige a los jardines de las esclusas, con magníficas vistas de las 9 esclusas de Fonseranes, que en realidad son una única esclusa, en escalera con 8 cámaras o cubetas de formas ovaladas y 9 compuertas, que ocupan 312 metros de longitud, salvando 21,5 metros de desnivel en 312 metros, entre la parte superior de las esclusas (frente a la Coche d’Eau-Maison du Site) y el nivel del Orbe, por donde discurría originalmente el Canal du Midi. La forma ovalada de las cubetas o cámaras de estas esclusas no son un capricho, su forma permite a los muros de piedra soportar mejor la presión del agua que fluye hacia ellos, evitando su rotura o deterioro. La construcción de estas 9 esclusas duró 2 años, desde 1678 a 1680. Desgraciadamente fueron terminadas poco después de la muerte de Pierre Paul Riquet.
1666: En octubre, Luis XIV firma el decreto que autoriza su construcción.
1667: Pierre-Paul Riquet inicia las obras del enlace Toulouse-Mediterráneo. Tenía 58 años.
1680: Paul Riquet fallece a la edad de 71 años, el 1 de octubre, en Toulouse. Para entonces, sólo faltaba una legua para terminar el Canal -4,8 km- y las 9 esclusas de Fonseranes estaban casi terminadas…
1681: Tras 14 años de obras, fruto del trabajo de 12.000 obreros, el Canal Real del Languedoc se inaugura el 24 de mayo con gran pompa y ceremonia.
1694: El canal se considera terminado. Vauban introdujo modificaciones y mejoras a lo largo de 13 años, incluso mientras el canal seguía funcionando, para evitar que su lecho se encenagara y que se desbordara durante las inundaciones.
1789: El «antiguo» Canal Real del Languedoc se convierte en el «Canal del Midi» durante la Revolución.
1984: inauguración de la cuesta del agua
1990: los últimos barcos comerciales de carga pasan por el Canal du Midi. La navegación queda reservada a las embarcaciones de recreo.
1996: en octubre, las 9 esclusas de Fonseranes son declaradas Monumento Histórico; en diciembre, el Canal du Midi es declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
2015-2017: obras de acondicionamiento del emplazamiento de las 9 esclusas de Fonseranes, lanzamiento del proyecto de clasificación «Grand Site de France».
En el kilómetro 8,84 llego al centro de interpretación oficina de información, bar restaurante de las esclusas de Fonseranes. Una vez desfrutado de este maravilloso lugar decido continuar por el canal, hacia el túnel de Malpas.
En el kilómetro 10´41 conecto con la travesía de Colombiers Vc9.
En el kilómetro 10´76 llego al puente de Vers les Jouvert.
En el kilómetro 11´23, el camino asfaltado continúa como CR128 por la derecha, en este punto el camino sigue en dirección oeste paralelo al canal, pero de tierra. Mi intención es poder llegar al túnel du Malpas excavado en 167 para pasar el canal debajo de la colina Ensérune, al oeste de Colombiers.
En el kilómetro 14´66, llego al bonito pueblo de Colombiers.
Colombiers es una comuna de la región de Hérault, Occitania, al suroeste de Beziers con la que limita.
La localidad se desarrolló en tiempos antiguos cuando los habitantes del cercano Ensérune Oppidum llegaron a asentarse en la llanura a lo largo del camino o vía Domitia que conecta Roma con la Península Ibérica a través de la Galia. Luego, se construye un castrum fortificado durante la Alta Edad Media, y Colombiers se convierte en un señorío próspero. Su territorio de se enriquece durante el secado del estanque de Montady en el siglo XIII. El desarrollo de la viticultura y la creación del Canal du Midi apoyan la buena salud económica del pueblo. Situado en la localidad de Colombiers, a orillas del Canal du Midi, el castillo, del que existen huellas escritas del siglo XII, ha sido modificado muchas veces desde sus orígenes medievales. Es el único castillo situado a lo largo del Canal du Midi. Deshabitado desde hace 15 años, ahora está siendo renovado. Poco a poco va revelando su originalidad arquitectónica. Debajo del castillo se pueden ver, entre otras cosas, magníficas bodegas históricas, donde se encuentran tinajas de azulejos que en el siglo XIX servían como tanques de fermentación para el vino. Estas bodegas deben distinguirse de la "Cave du château", que alberga la oficina de turismo de La Domitienne. Fue Clémence Lagarrigue quien, entonces propietaria del castillo, hizo construir la "Cave du Château" a finales del siglo XIX, ya que las situadas bajo el castillo se habían quedado pequeñas. Adquirida por el municipio, la bodega se dedica ahora a actividades culturales y artísticas, alberga exposiciones y alberga la Oficina de Turismo. En la década de 1980 se construyó un puerto fluvial, donde los navegantes pueden detenerse allí. En el siglo XX, la proximidad de Béziers permite el establecimiento de un área comercial e industrial, pero la ciudad conserva su encanto, entre el Mediterráneo y las primeras estribaciones de Cevennes. Ahora con más de 2400 habitantes, con su puerto deportivo en el canal y su agradable ambiente, Colombiers es una parada interesante para cualquiera que se quede en Languedoc. En términos de patrimonio arquitectónico, un descubrimiento de Colombiers puede comenzar con la iglesia de Saint-Sylvestre y Sainte-Colombe, cuyas fundaciones más antiguas se remontan al siglo quinto: testifica un altar visigodo que aún se encuentra en el edificio que fue remodelado en el duodécimo, decimonoveno (vitrales) y finalmente en 1986. También hay visibles sarcófagos antiguos, fuentes bautismales de la época medieval y una pintura en la víspera de Año Nuevo. De un tipo muy diferente, la antigua bodega del castillo Colombiers, construida en el siglo XIX, merece una visita. Terminada mi visita me dirijo hacia el túnel de Malpas.
En el kilómetro 16,14, por mi izquierda, me dirijo por senda que baja a la boca del túnel de Malpas.
El túnel de Malpas es un túnel creado en 1679 bajo la colina de Ensérune en el departamento del Erau para hacer pasar el Canal del Mediodía. Es el símbolo del empeño de Pierre-Paul Riquet, ideólogo del canal. Se trata del primer túnel creado para pasar un canal. Durante los trabajos del Canal del Mediodía se toparon con la colina de Ensérune, lo que era un gran inconveniente. Debajo de un suelo muy duro se encontraba una montaña de gres muy blando, sujeta a la erosión. El primer ministro Colbert fue alertado rápidamente de esta situación e hizo detener la obra. Los detractores de Riquet parecían haber conseguido su objetivo, ya que se amenazaba el conjunto del proyecto por una colina. Riquet había preferido este trazado en vez de desembocar el río Aude, tal y como proponía Clerville, arquitecto de Luis XIV. La travesía del río era un obstáculo mayor, ya que la obra era más cara y se podía interrumpir el tráfico de barcos por las crecidas o las sequías. Con todo, Riquet pidió al maestro de obra Pascal de Nissan continuar en secreto los trabajos, a pesar de los riesgos de hundimiento. En menos de ocho días, el túnel fue agujereado y sostenido por una bóveda cementada de punto a punto. Riquet sólo tuvo que guiar al intendente Daguesseau al túnel y quedó completamente sorprendido. El túnel mide 165 metros de largo, evita una esclusa suplementaria en el recorrido y es una muestra del empeño de un hombre frente a los detractores que tenía. Éste es el motivo de que el túnel lleve el nombre de Malpas. Bajo el túnel de Malpas se encuentran otros dos túneles que se cruzan en el trazado (aunque a niveles diferentes). El primero y el más debajo de todos es una galería que permite el drenaje del estanque de Montady del siglo XIII, este sistema solía evacuar el agua del estanque vecino drenado conocido como Étang de Montady. Entre el acueducto de drenaje y el túnel del canal, a 2 metros debajo de éste se encuentra el túnel ferroviario de la línea Béziers-Narbona.
En el kilómetro 16,63, alto del túnel de Malpas, donde por la derecha sigo por la D162E3 hacia Ensérune-Oppidum y museo arqueológico. El museo, situado en el corazón del lugar, permite descubrir el papel fundamental de Ensérune y conserva vestigios de su antigua ocupación, que duró casi seis siglos, incluida una rica colección de vasijas áticas y de armamento celta.
En el kilómetro 18´09 estoy en el Oppidum de Ensérune. Aquí aprovecho para reponer fuerzas, comiendo parte de las viandas. Encaramada en lo alto de una colina, Ensérune es una antigua ciudad celta ocupada entre el 575 a.C. y el 200 d.C. Las investigaciones arqueológicas, realizadas desde principios del siglo XX, han revelado algunos de sus secretos. Los restos visibles hoy a lo largo del recorrido dan testimonio de la vida transcurrida en la ciudad fortificada (Oppidum) y ofrecen un panorama excepcional del paisaje circundante: Camino de Domiciano, Canal del Mediodía, estanque seco de Montady. El Étang de Montady, a simple vista parece un reloj solar enorme, pero en realidad es que era un antiguo estanque que se secó en la Edad Media situado al oeste del departamento francés de Hérault. El estanque de Montady, clasificado en 1974, tiene 400 hectáreas de ancho, drenado en el siglo XIII por desagües en forma de rayos que conducen el agua desde la periferia hasta el centro, dándole ese aspecto tan particular. Gracias a los canales de drenaje, el agua se conduce hacia un colector central, lo que explica la disposición en forma de estrella de los campos y viñedos. Este sistema de canales se remonta al siglo XIII. A continuación, el agua es evacuada por una zanja adosada a la pendiente hacia el estanque de Capestang y por una galería bajo la colina de Ensérune y bajo el túnel de Malpas. Continuando con el paseo por el lugar, me llama la atención lo que parece los restos o cimientos de un torreón antiguo, o que podía haber formado parte de la defensa del “Oppidum” pero nada más lejos de la realidad. Son los restos de “La torre del mal”. En 1911, Joseph Maux, joyero de Béziers, adquirió 2,5 hectáreas de terreno en lo alto de la colina de Ensérune para construir una residencia de campo con un parque arbolado. En el promontorio oriental se construyó, una torre con cisterna a modo de depósito de agua para regar los 3.000 árboles, arbustos y flores allí plantadas. En su base se encuentra un espacio de descanso con decoración de piedras llamada rocalla. Es una de las 8 rocallas diseñadas por el arquitecto Francou, también originario de Béziers, que eran utilizadas como elementos decorativos para ornamentar el parque familiar. Terminada la visita inicio el regreso a Valras.
Descendiendo del Oppidum a mi izquierda paro a contemplar la llamada “Terraza de los Silos” Se corresponde con una importante zona de almacenamiento de la ciudad de Ensérune. Con una profundidad de hasta 3 metros, los 72 silos de la terraza excavados en el suelo arcilloso para conservar cereales. Descubierta durante las obras de construcción de un aparcamiento en 1966, la terraza fue excavada posteriormente por el profesor Hubert Gallet de Santerre y sus alumnos del taller escuela de la Universidad de Motpellier. Se han desenterrado un total de 300 silos en las 30 hectáreas del Oppidum, que era un verdadero granero fortificado durante la Antigüedad.
En el kilómetro 26,48 paso de nuevo por las esclusas de Fonseranes.
En el kilómetro 34´77 estoy de regreso en Villenueve de Béziers principio y final de la ruta de hoy.
Las fotografías aparecen por orden de ruta.
Serafín Martín.
Fuentes propias y:
https://es.wikipedia.org