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Ruta 71 - Adahuesca-Buera –San Dulcis –Río Vero
El 3 de Julio de 2004 salgo de Adahuesca en dirección a Buera , antes de atravesar el Río Vero me desvío a la derecha por la carretera que va a Barbastro y paralela al Río Vero ,pero al kilómetro y medio a nuestra izquierda esta el desvío a Buera ,atravesamos el Río Vero y comienza un buena subida hasta Buera ,tiene un casco urbano pequeño, pero bonito, tiene una iglesia pequeña de aire medieval, dedicada a San Juan Bautista, su nave es de cañón rebajado, pertenece al obispado de Huesca. Me dirijo por un camino asfaltado entre almendros y viñas a la ermita de San Juan donde hay varios indicadores, entre ellos al pozo del Moro ,esta ermita está dedicada a San Juan Bautista patrono de Buera , aquí acuden las gentes de Buera , a la celebración religiosa, con bendición y reparto de pan , este día esta ermita abierta todo el día, me dirijo al Pozo del Moro por un camino en pendiente pronunciada que es maravilloso ,el pozo esta a la orilla de un barranco ,este pozo es un nevero que servía para almacenar nieve ,que se prensaba entre capas de paja, salgo de nuevo a la ermita de San Juán, y me dirijo a San Dulcis por una carretera en muy buen estado aunque con curvas muy cerradas. A LLEGAR A San Dulcis me encuentro con un conjunto muy bonito y por lo que veo recientemente restaurado y exteriormente bien conservado y que merece la pena visitar os lo aseguro, La Santa Maria de Dulcis que vemos no es la original ya que el primer santuario era Románico ,junto al edificio religioso todavía podemos ver restos de estas construcciones románicas, donde vivían el prior y capellanes, y contaba, con aljibe ,bodega, lagar ,horno, y habitaciones ,que son los restos en piedra que vemos. Los hombres del Barroco consideraban al Románico tosco y lúgubre, por eso en el S-XVII se construyó la iglesia actual, para sustituir el templo Románico, regreso a Adahuesca, no sin antes sumergirme en el Río Vero para contemplar su fauna y refrescarme, hay unas pozas con un agua todavía clara y limpia.
Serafín Martín
© Cheluy -Sera 2004