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Ruta.-001. Ruta del agua 3.
Estación de Selgua, Pomar de Cinca, Pozo Agullón, Estiche de Cinca, Conchel.
El 28 de Octubre de 2006 salgo de la Estación de Ferrocarril de Selgua en dirección a Pomar de Cinca, esta estación hoy en deshuso, fue la primera línea de ferrocarril entre Barcelona y Zaragoza, tuvo diversos proyectos sobre por dónde iba a transcurrir la traza. Unos intereses aconsejaban el paso por Barbastro y Huesca y otros buscaban el camino más corto, por las tierras de Alcubierre. Finalmente se llego a una solución salomónica; salir de Zaragoza por el valle del Gállego hasta los llanos de la Violada, descender por Poleñino y seguir por Sariñena a Monzón hasta llegar a Lérida. Posteriormente, en 1864, Huesca capital fue adjudicada en 1868 pero tardarían 12 años en verse terminada. Se inauguró el 28/6/1888 con una gran expectación; el primer viaje salió desde Barbastro, con un tren con 800 pasajeros a las 9 de la mañana, y volvió de nuevo al solemne acto inaugural dos horas después. Otros proyectos para comunicar Barbastro con otras ciudades nunca llegaron a realizarse Y el ramal de 19 kilómetros que unía Barbastro con Selgua finalmente quedó cerrado por ser poco rentable.
Monzón está muy cerca de aquí pero lo dejo para otro día, salgo a la carretera que en una rotonda pasadas las vías del tren por un paso elevado, me indica Sariñena y Pomar de Cinca, al que llego con la mañana soleada. Pomar se encuentra situado junto a la desembocadura del barranco La Clamor en el Cinca. Lugar de abolengo histórico -se cita ya en la documentación medieval de 1.083- En Enero del año 1.100, Pedro I fortificó la localidad construyendo su castillo del que hoy no queda vestigio alguno.
Uno de los episodios históricos más relevantes acaecido en Pomar fue la muerte de Ferrán Sánchez, primer barón de Castro. Este antiguo suceso uno de los primeros de que se tiene noticia escrita en Pomar se sitúa a caballo entre la historia y la leyenda.
Llego a la
plaza donde hay un pequeño jardín y la iglesia
La Iglesia
de San Salvador del S. XVI con portada plateresca, bóvedas de profusa
nervadura y cabecera pentagonal, con motivos geométricos, torre cuadrada, en
las capillas laterales se guardan pequeños tesoros como el retablo de la
Asunción de lsa Virgen del Siglo XV la iglesia pertenece al Gótico Tardío.
La arquitectura urbana de notable tradición, donde se articulan calles
irregulares con trazado de diversas épocas y edificios de valor histórico, con
buenos ejemplos de arquitectura popular, entre los que cabe destacar “casa
Sancho”, “casa Arroyo” y su portada del S. XVI.
El Caserío, emplazado en alto para resguardarse de las periódicas avenidas con que el Cinca ha inundado desde siempre la llanura aluvial y para otear la posible llegada de enemigos en la convulsa historia de estas tierras, se eleva también cercano a las fértiles tierras de labor donde se han instalado las huertas desde tiempo inmemorial. Próspera y acogedora villa, se encuentra integrada en el municipio de San Miguel del Cinca junto a Estiche y Santa Lecina. Su economía es de base agropecuaria, con el beneficio que suponen los riegos del Cinca, a través de la acequia del Selgua, que fertiliza gran parte del suelo con notable incremento cerealista, hortofrutícola y ganadero.
La población de 450 habitantes dedicados fundamentalmente a la agricultura y ganadería, se estabilizó a partir de la puesta en regadío de las tierras del municipio con la llegada del agua al Canal del Cinca. Me acerco hasta la ribera del Cinca que está con una estampa melancólica otoñal preciosa. Aquí en este mirador comienza un paseo precioso el de “la barca”. Pero lo que me ha traído hasta aquí es el Pozo Agullón.
Inocente de mí creía que el
Pozo Agullón estaría indicado, pero como siempre en Aragón somos el ejemplo de
lo que no se debe de hacer al planificar una ruta turística temática, ni en la
carretera por la que vine ni en el propio pueblo hay un solo indicador al
pozo, un vecino me indicó más o menos la dirección a tomar, coger un camino
asfaltado que sale a la carretera a Sariñena pero me perdí, hayé a un cazador
que me volvió a indicar en dirección a la carretera a sariñena y al llegar al
desvío principal ¡oh milagro! Había un cartel indicador. Determinar la
antigüedad del pozo no es fácil, ya que éste tipo de obras hidráulicas han
sido utilizadas de forma continuada a lo largo del tiempo, siendo más
valoradas sus características etnológicas, que su antigüedad. El pasillo
interior que sirve de cerramiento del aljibe, realizado en piedra sillar y
donde se colocó una cubeta que permitía verter el agua en su interior para, a
través de un canalillo abierto en la roca y dispuesto en bajada, llenar un
abrevadero adosado al exterior del pozo. Las dos aberturas superiores en el
cubrimiento de lajas serían por donde entraría el agua, tanto de lluvia como
la vertida expresamente para su almacenamiento, que llenaría el depósito
excavado en la roca. Dentro del pozo se diferencian tres partes, un
receptáculo para almacenar el agua, excavado en roca arenisca a modo de
recinto cubierto abovedado, apoyado en la parte exterior por medio de un pilar
de sillares. Para ir a Estiche debo pasar nuevamente por Pomar del que hago
unas fotos desde el pequeño puertecico que me lleva a Estiche por una muy
buena carretera, la A-130 Llego a Estiche de Cinca que como Pomar pertenece al
municipio de San Miguel de Cinca. Situado a una altitud de 247 metros En 1991
tenía una población de 145 habitantes.
La primera cita histórica del lugar se
fija en 1.134, año en que el rey Alfonso I cede el castillo de “Estilic” a
doña Toda.
Su Iglesia Parroquial es de origen barroco. Reformada en los S. XVIII y XIX.
En la plaza se encuentra el ayuntamiento una portalada -de reciente hallazgo-
de tres arcos de medio punto.
Se han descubierto yacimientos prehistóricos como el de “Las Almacidas” y “El
Tozal de Maracullo”, pertenecientes al Neolítico y Bronce y en aceptable grado
de conservación.
El casco antiguo mantiene calles y plazas de trazado antiguo. Las
construcciones, por lo general, no rebasan las dos plantas, hechas de tapial y
teja curva que enriquecidas con portadas, balcones voladizos y forjas (s.
XVIII y XIX) ofrece una agradable perspectiva.
En la actualidad, la agricultura y la ganadería son las principales
ocupaciones de los 144 habitantes de esta localidad. Tiene un balcón que se
asoma al Cinca, donde se puede contemplar su cauce con sus maravillosas
choperas, enfrente de este balcón contemplo Alfantega, el siguiente pueblo al
que quiero ir, pero como las desgracias nunca vienen solas un vecino me dice
que ,no existe comunicación directa con este pueblo, a pesar de que mi mapa me
indica lo contrario, increíblemente para ir a Alfantega debo seguir hacia el
Sur o volver sobre mis pasos cruzar Monzón y bajar por Pueyo de Santa Cruz, lo
que hoy me es imposible por la hora que es. Por lo que decido regresar hacia
al punto de inicio de esta ruta, pero de regreso decido entrar en Conchel, voy
directo a la Fuente de Conchel, que está en un bonito parque a la entrada de
la localidad.
Conchel proviene de la palabra latina conciliun tiene sus orígenes en el siglo VIII a.de C. en la Edad de Bronce, la posterior cultura ibérica (S.VI a.de C.) y la romanización a partir del S.II a.de C.
Conchel es conocida documentalmente desde finales del siglo XI. Dominio de realengo que tuvo como primeros “tenentes” a Don García Ximenez de Grostán y a Don Berenguer Gombaldo de Capella.
El primer templo cristiano de origen románico fue ampliamente remodelado en 1702 desaparecido durante la Guerra Civil un importante retablo gótico del siglo XV. Actualmente en su interior encontramos un magnífico retablo donado por el antiguo Colegio de San Vicente de Paúl así como otras obras artísticas de indudable valor, Vitrales, un Cristo crucificado de fina factura, destacando un retablo relicario pintado en el año 2000 por Ruizanglada que contempla la imagen de la Veracruz , la reliquia aquí guardada sitúa a Conchel al nivel de centros de religiosidad como el monasterio de San Toribio de Liébana o Caravaca de la Cruz.
Me dirijo a visitar el Torreón o lo que queda de él. Son los restos del Castillo de la Edad Media del que se conserva su característica torre. Fue morada del árabe Calafón sarraceno, está edificada en buena sillería, se pueden apreciar todavía las troneras y saeteras para su defensa. Desde el mirador situado junto a la torre se divisa una magnífica vista del Río Cinca su chopera, quizás la más grande de Europa, la ermita de Nuestra Señora de la Alegría y el Castillo Templario de Monzón.
Conchel es uno de los pocos pueblos aragoneses donde sus vecinos han levantado un monumento con su plaza ,al que esta considerado para muchos el mejor y más genial pintor de todos los tiempos, el aragonés Don Francisco de Goya y Lucientes ¡Bien por los vecinos de Conchel!
Desde aquí enseguida llego al final de mi ruta.
Las fotografías aparecen por orden de ruta.
Serafín Martín
Fuentes propias y: www.turismedia.com
© Cheluy -Sera 2006